Pentecostes 10–1 de agosto

 

¡Jesús, el pan de vida!

Décimo domingo después de Pentecostés
1 de agosto de 2021

Lecturas escogidas Exodo16:2-4, 9-15 Salmo 78:23-29 Efesios 4:1-16 Juan 6:24-35


INVOCACIÓN

Líder: Nos convocas a estar en tu presencia, y así
venimos humildes, con hambre y sed espiritual.
Te suplicamos, Dios, que proveas maná fresco a nuestro espíritu.
Congregación: ¡Danos hoy nuestro pan de cada día!

Líder: Danos el alimento nutritivo que nos permita
no sólo permanecer conectados(as) a ti,
sino que nos haga crecer en fe, en esperanza y en amor.
Para así llevar tu mensaje de amor, de compasión y justicia.

Todos(as): Espíritu Santo ven y danos nuestro pan de hoy.


TIEMPO DE CONFESIÓN

Líder: Hoy confesamos que hay instancias en nuestra vida
en las que no escuchamos tu voz, no porque tú estés silente,
sino porque no prestamos atención.
Y es que muchas veces estamos alimentóndonos
de cosas que no son nutritivas.
Estamos comiendo lo que no nos conviene.
En ocasiones lo que comemos nos separa y nos impide
trabajar en unidad como pueblo tuyo
porque no estamos atentos(as) a los factores nutricionales.
Muchas veces insistimos en comer lo que queremos
aun tomando el riesgo de separarnos unos(as) de otros(as) y de ti.
(Momento de silencio y reflexión)


SEGURIDAD DEL PERDÓN

Líder: En Jesús hemos sido dados con el mejor ejemplo
de alguien que ha sido nutrido por ti, Dios.
Cristo nos perdona, nos restaura y nos hace completos(as)
para restauración de tu cuerpo y la gloria de tu nombre.
En gratitud compartamos el saludo de la paz.


TIEMPO DE OFRENDAS

Líder: Traigamos nuestras ofrendas a quien dijo:
“—Yo soy el pan de vida. El que a mí viene
nunca tendrá hambre, y el que en mí cree
no tendrá sed jamâs.”
Ofrezcamos nuestros pedazos de pan
y pequeños pescados para que al unirlos
podamos alimentar una multitud con esperanza
y amor para la gloria de Dios.

RECOLECCIÓN DE OFRENDAS (Este es buen momento para música instrumental, solista o un himno congregacional.)

ORACIÓN DE DEDICACIÓN

Bendito Dios y Padre, Madre nuestro(a),
a través de tu hijo Jesús nos has dicho que
quien viene a ti no tendrá más hambre y sed.
Hoy ofrecemos nuestra parte, nuestros pedazos de pan
y nuestros pequeños pescados, para contribuir
a la alimentación espiritual de la multitud
que se nos aproxima hambrienta a diario.
Con esto fortalecemos el reino de Dios entre nosotros(as).
Recíbelas, bendícelas y úsalas para la gloria de tu nombre. Amén.


BENDICIÓN PASTORAL

Salgamos confiados(as) en que nuestro Dios
hará provisión diaria para nuestras necesidades;
sosteniéndonos en tiempos duros y difíciles;
levantándonos cuando estemos caídos(as),
acompañándonos cuando sintamos estar solos(as)
y siempre, siempre demostrando su amor.
Que nuestra jornada dependa a diario de esa provisión de Dios.
Vayamos en paz. Amén.

 

¡Jesús, el pan de vida!, fue escrito por la Reverenda Dámaris E. Ortega, en Plainfield, NJ.

Copyright 2021, Faith INFO Ministry Team, United Church of Christ, 700 Prospect Avenue, Cleveland, OH 44115-1100. Permission granted to reproduce or adapt this material for use in services of worship or church education. All publishing rights reserved.

pentecostes 10–1 de agosto